jueves, 24 de enero de 2013

EL RUGIDO DEL JAGUAR Y EL INTERNET






EL RUGIDO DEL JAGUAR Y EL INTERNET

 

Luz María Sánchez Rovirosa

“El ingenio es un don celestial bien inútil: lo que hace falta es razón, buen sentido, cordura y juicio”. Chesterfield.

 

La iniciativa que promueve el senador Armando Ríos Piter (PRD) “Internet Libre para Todos”, es la primera de este período legislativo, que se pretende como ciudadana; para ello se necesitan recaudar 150 mil firmas, lo cual “a ojo de buen cubero” resulta por demás sencillo. El fin en sí de la susodicha, es el de elevar a “rango constitucional” el derecho al libre acceso a internet y la ley que hará operante dicho derecho.

Parte de texto señala: “Que el internet sea un derecho no solo enunciativo, sino que su ejercicio esté garantizado con infraestructura pública y haciendo un uso del espectro que, sin afectar intereses comerciales, materialice este derecho sobre todo a las personas de menos recursos, los estudiantes y las comunidades más aisladas”

Es notorio de esta iniciativa la parte de un interés político “presuntamente” para el desarrollo social, que tiene contemplados a los “pobres también”, mediante la provisión de sofisticadas tecnologías de información y comunicación. Por supuesto tal como se pretende, requiere de políticas y marcos regulatorios muy especiales para generar un entorno conveniente al desarrollo de una infraestructura adecuada, sobre todo en zonas de difícil acceso, que son muchas.

La iniciativa como tal me parece congruente con la necesidad de proporcionar a la población opciones y herramientas de desarrollo y superación, y ciertamente la propuesta tiene inmersos un sinfín de beneficios para la misma; sí es que no se pierden en el camino (recordar los proyectos fracasados de tele secundaria y educación a distancia), la llevan a cabo con la cautela y cordura, pero sobre todo le dan el oportuno seguimiento.

Tres problemas, dificultades, inconvenientes, etc. observo desde mi humilde opinión que me impiden estar de acuerdo con la iniciativa en su totalidad.

Comenzaré por el menos grave (sin dejar de serlo), que es el anuncio o presentación de la iniciativa de forma global, lo cual (como está), me parece una utopía; ya que prácticamente es imposible vaciar sobre el país una dosis tan alta de tecnología, considerando que para su operación son necesarios 30 mil millones de pesos (costo de la misma), que según arguyen, es menos que lo que costaría colocar una estela de luz en cada capital estatal. Un “detalle” tan vanal para merodear su financiamiento empieza por resultar chocante, aunque se comprenda que estos implementos son de altos costos.

Segundo punto, los proyectos tan ambiciosos como este, son prácticamente imposible llevarlos a cabo en su totalidad (me imagino que no lo pretenden), ya que necesariamente se tienen que plantear las estrategias de las etapas desde el inicio, y el tiempo de las mismas, así como su evolución, que no se encuentran implícitos en la descripción del proyecto.

El tercer punto y el problema más grave que veo en esta iniciativa, es que usen la palabra “todos”, para usar a todos. Todos son todos sin excepción.

La pobreza y más la extrema (marginación), es un fenómeno individual y colectivo caracterizado por no poder satisfacer las necesidades humanas fundamentales de supervivencia como son: alimentación, salud,  techo digno, educación, trabajo, identidad (acta de nacimiento), recreación, autoestima, libertad, participación social y confianza en el futuro. Si falta alguna de ellas, imposible dar un paso más antes de compensarlas.

En México (razón, creo de La Cruzada por el Hambre), los cuadros de desnutrición, especialmente la infantil, son dramáticos con la indeseable muerte prematura. Las adicciones, los abusos, la violencia intrafamiliar, la prostitución, la incursión en células del crimen organizado por falta de oportunidades, van en constante aumento. ¿Cómo se puede dar cabida a una iniciativa como esta, en una población demasiado extensa de carencias y volatilidad? Cuando prioritariamente se tienen que enfocar los esfuerzos a erradicar la injusticia y la desigualdad social, y entonces, solo entonces, -puedan disfrutar- del espectro de comunicación para conectarse con el mundo.

Los logros macro económicos que “sostienen” a México, definitivamente no se ven reflejados en la vida cotidiana de la mayoría de las personas, y las situaciones de precariedad extrema, tal parece que no importan. Hay personas que no tienen un documento que avale su existencia, y por lo tanto ni siquiera son sujetos de inserción a los programas de desarrollo social, para los cuales se necesita una identificación. En conclusión el internet y/o la estela de luz, no van a mitigar ni su hambre, ni su salud, ni van a magnificar su integridad y su dignidad.

Desde mi humilde punto de vista, la ambición de esta iniciativa distorsiona la manera de ver y afrontar la vida, y genera una percepción errónea sobre lo que uno es y lo que son los demás, en parte por la limitación de la misma condición humana, en la que siempre está inmerso el problema ético.

Adelante senador Ríos Piter con la iniciativa, dejando de pensar en ella como la panacea de los pobres. Pero me parece también que trae consigo instrumentos indispensables de progreso, pero también sin dejar de considerar que estas herramientas son inherentes a la educación, que por supuesto ya es un derecho constitucional, así como nuestras Garantías Individuales. ¡Vale la pena reflexionarlo!

lmsarovi@hotmail.com

martes, 15 de enero de 2013

QUERUBINES DE ZEFERINO


 
 
 
Crónicas Rurales:                      Confiscación Fiscal, de los

 

Por: Juan López                            Querubines de Zeferino

 

   Navidad ha sido siempre temporada emotiva: recuerdos gratos, vendimia  de paz, fiesta del corazón. La cual con dinero es más alegre. Cavilaciones tales retraían a Carlos Álvarez. Asomaba apenas a este calendario el año 2,000. Jamás los estetas del gobierno se habían adjudicado, por sus buenos oficios o su bonita cara, un bono económico por productividad.
 
   Éste sería el primero. Olería a sorpresa pero, la diaria fatiga, el sacrificio personal, el desgaste humano, la friega hasta el delirio, lo justificaban. 

   Y si operaba en silencio, con la discreción con que se hace todo lo que no queremos que se sepa, entonces la prestación adquiere visos de: si te vienen a contar cositas malas de mí, manda a todos a volar y diles que yo no fui. 

   Era el gobierno de los contadores. Los había amarillos, azules, colorados, verdes, pardos, enanos, tordos, de la más diversa especie; más, eso sí, nadie honesto, ninguno decoroso, ni por error alguno probo. 

   Ahora, si la tarifa fue tasada en cincuenta mil pesos Per-cápita. ¿De dónde extraer el saldo total para atender la gula de tanto sibarita? Gentiles perezosos para recaudar del fisco, de repente se vieron tan prestos en toparse con el venero, que los dotara de los suficientes caudales que les indemnizaran sus insanos apetitos. 

   Carlos Álvarez firmó el papeleo que justificó la confiscación de la caja de ingresos del hotel El Presidente. Mandó a Memo su lacayo. Maniobraron el despojo disfrazados de publicanos e hicieron de la alcabala en efectivo, un objeto sensual para, entre todos, repartirse medio millón de pesos. Hasta los hoy difuntos recibieron su mochada. Zeferino daba gracias a Dios por el obsequio de 50 mil pesos que le tocaron de los dividendos del botín. 

   Ellos se autodenominaban empresarios. Y empresarios era El Presidente, hospedería atracada por la caterva municipal: Cuando la perra es brava, hasta a los de casa muerde. Así de sencillo justificaban estos maloras tan oronda sustracción a los haberes del hotel.  

   Grupo de taimados, docena de ladinos, hicieron valer un procedimiento interventor para cobrar a la hospedería morosidades prediales. Correcto. Lo falto de vergüenza es acosar a un causante, someterlo a la confiscación, intervenirle sus ingresos, para mitigar la única necesidad de otorgar a los funcionarios ruines, un bono Navideño que les hizo más dulce sus pascuas.
   Fue un latrocinio callado. Pocos conocieron la depredación. Como todo lo indebido, hicieron mutis y evadieron la culpa hasta que El Novedades de Acapulco divulgó detalles, exhibió los cheques, los recibos e informó los nombres y apellidos de tan bellos querubines. 

   PD: “No me den, pónganme dónde hay”: Refrán burocrático.

jueves, 10 de enero de 2013

LA DEUDA Y SU CONFLICTO



 
LA DEUDA Y SU CONFLICTO

 

Luz María Sánchez Rovirosa

“Poner orden empieza por sancionar a quien incurrió en el desorden….y en el caso de Acapulco, el desorden llegó hasta el buró de crédito….¿Se necesita algo más para actuar con justicia?” Lmsarovi.

 

Luis Videgaray titular de Hacienda, señala que el gobierno federal no rescatará las finanzas de ningún estado o municipio, aunque se hayan declarado en quiebra, pues sus administraciones deben ser capaces de recaudar más ingresos tributarios, ajustes en sus gastos y ordenar sus finanzas.

Es lamentable dijo; escuchar que en tres años el endeudamiento de municipios y estados se ha triplicado, y que casos como el de Jalisco, estado al cual su “nota crediticia fue degradada al nivel mínimo posible”, o en el caso que nos ocupará en este artículo, el municipio de Acapulco entró al buró de crédito, es algo que desde que se califica la deuda, nunca había pasado, lo que es un indicador más de que se tiene que poner orden.

La sentencia está echada, por más que Luis Walton (que ya no ve lo duro sino lo tupido), se tape los oídos y esconda la cabeza como el avestruz y se empecine en que el gobierno federal tiene que rescatar a Acapulco con el argumento que es parte del país. ¿Y los demás estados y municipios quebrados a dónde pertenecen?

Me pregunto ¿Por qué razón tendría que hacerlo el gobierno federal y no su administración? ¿Acaso el municipio de Acapulco no es libre? (Art. 115 Constitucional) Si no se siente capaz y no tiene un equipo capaz, ya que ni siquiera ha nombrado un titular en Catastro, pues que renuncie. -Para luego es tarde-.

Y si no va a renunciar pues que deje de quejarse y se ponga a buscar alternativas viables, por ejemplo que rescate el padrón de contribuyentes, que aplique sanciones a los morosos, que reestructure la deuda, que disminuya la nómina, que baje los sueldos a funcionarios y regidores y que no les de gasto para gestoría social (¿?); que le apueste al turismo extranjero y al nacional no sólo de temporada, o que vaya a visitar a Carlos Slim, algo se le tiene que ocurrir, para allegarse de dinero y salir adelante; y porque para ello rescató de las cenizas del aberrante gobierno de Zeferino, al eminente Carlos Álvarez Reyes, quien parece perdió su brújula, ya que reitero, él fue corresponsable de esta desgracia financiera, porque con su participación en el Congreso (presidiendo la comisión de cuenta pública), estos desorbitados préstamos (uno tras otro) fueron aprobados y puestos directito en manos de Manuel Añorve Baños (y de José Luis Ávila); y de allí solo Dios sabrá.

Y justo aquí es a donde quiero llegar. Desde hace varios días, somos testigos del reinicio de una “pugna” entre el diputado federal (plurinominal) Manuel Añorve Baños y el diputado local José Rubén Figueroa Smutny, la cual cada día se magnifica obviamente con las intervenciones de los diferentes “actores” políticos que ya han tomado partido y que como en el juego de la infancia “a la víbora de la mar”: ¿Con melón o con sandía?

Ignoro si entre ellos (Añorve-Figueroa) haya problemas de tipo personal, que eso por ley es independiente del quehacer público, porque es privado, aquí el punto central es la contrariedad y la preocupación del quebranto financiero del municipio de Acapulco, el cual (sin pudor alguno) el bando priísta a favor de Añorve está tratando de diluir en aras de la “supuesta” afectación al partido (PRI) y está desenfocando el problema de su centro, así como a los principales afectados que no son los afiliados al PRI, es el pueblo de Acapulco y eso que quede claro.

Lo que está sucediendo en Acapulco es muy grave, delicado y de difícil solución. El desastre financiero se cometió ante los ojos de cualquier autoridad pública y de la iniciativa privada (Banca) corresponsable del desfalco por prestar sin precaución. Insisto ¿Dónde estaban los diputados del Congreso de entonces (incluyendo a Carlos Álvarez, hoy flamante secretario de Planeación y Presupuesto de este  municipio quebrado) que aprobaron sin ningún empacho los cuantiosos préstamos uno tras otro? ¿Dónde estaban los ojos de la dependencia fiscalizadora, que el ratón les pasó por enfrente y encima le dieron su ratonera? ¿Dónde estaba y está la Contraloría Municipal, la AGE y demás instancias que vigilan la salud de las finanzas locales? ¿La Banca le prestó al municipio con garantía de las Participaciones Federales, que ramos comprometieron? ¡Qué miedo!

Pero lo extremo es: ¿Cuál y por qué es la molestia del bando priísta añorvista por pedir que se ajusten cuentas que claramente no están claras?

En este caso el diputado local Rubén Figueroa Smutny no está incurriendo en ningún ilícito (al contrario), quizá (o más bien) es protagónico, junior, nene, bipolar y demás; pero definitivamente no está denostando al partido en cuestión. Como diputado y desde ese espacio de representación popular y legislación, está alzando la voz para denunciar algo muy grave que nos afecta a todos los ciudadanos del puerto, no sólo a los militantes del PRI.

Para terminar, es lamentable que el pleito esté permeando hasta las familias (desagradable costumbre de la política en Guerrero) y eso no está bien; amén que los dimes y diretes están extralimitándose -tipo verduleras-, para entretener al pueblo mientras se lo friegan.

En este dramático caso (aclaro que el PRI me cae muy mal), Rubén Figueroa Smutny pésele a quien le pese (incluso a la llorona), y sea por lo que sea, está en lo correcto. En estos momentos al diputado local no le asiste el partido (PRI), le asiste la razón. ¡Vale la pena reflexionarlo!

lmsarovi@hotmail.com

miércoles, 2 de enero de 2013

PALÍNDROMO MUNICIPAL


 
 
 
 




Palíndromo Municipal

 

Juan López

 

   “Dábale arroz a la zorra el abad”.

   Usted si lee esta frase al revés, dice lo mismo. Lo Cual es precisamente la magia de los palíndromos. Definidos como: una palabra, número o frase que se lee igual hacia adelante o hacia atrás. Lo que escriba al revés se puede leer igual al derecho.

   Los hay de toda laya y medida: Siéntate Ana en la hamaca… La tomo como tal… Reconocer… Adán no cede con nada… Oirás orar a Rosario… No deseo yo ese don… Numéricos: 1221, 123,454,321, 1991…

   En la literatura han existido autores altamente calificados por su prestigio y sus obras que han dedicado memorables citas a este género tan difícil.

   Julio Cortázar fue uno de ellos. Escribió bellas e insólitas, frases que de un lado para otro expresaban lo mismo.

   No se trata de una novedad en nuestro idioma. Desde la antigüedad fue vasta la inteligencia que en latín y arameo, en griego y persa, localizaron perlas manuscritas que jugaban con su propia lectura de ida y vuelta.

   Se atribuyen al poeta Sótades, eminencia griega, III siglos antes de Cristo, los primeros arrevesados enredos.

   Eso sí, existen verdaderos récords para escribir un palíndromo original. También son cifras al revés: muy pocos.

      Hay autores como William Shakespeare que rehuyeron al compromiso de imaginar aunque fuese uno. Gabriel García Márquez es de los que afirman que jamás ha pensado uno y menos lo ha escrito.

   Sin embargo, como en todo, hay autores de este género que los han hecho de manera involuntaria, de chiripa o palomazo.

   No se lo han propuesto y accidentalmente han dado en el clavo y se han vuelto palindromitos sin que ese haya sido su propósito.

   Para esto no son necesarias las aclaraciones. Sale sobrando el clásico “Yo no dije lo que dije” o, “si lo dije, pero lo dije de otra manera”. Algo usual en los políticos que intentan limpiar sus ocurrencias, desmintiendo a la opinión pública de sus asertos y desaciertos.

   De un caso típico acabamos de enterarnos. El presidente municipal de Acapulco precisó que, cuando en su discurso por la primera visita presidencial al puerto, dijo que “la esperanza de los acapulqueños, está en el Presidente de la República”: habló de la Institución, no de Enrique Peña Nieto. Como si fuera posible desasociar a ambas figuras públicas.

   Al boxeador Juan Manuel Márquez le sucedió algo parecido. Luego de noquear al filipino Manny Pacquiao, envió un saludo y dedicó su triunfo al Presidente de la República. No dijo nombre. Pudo haber sido ese presidente aludido Santos de Colombia o Hugo Chávez de Venezuela. Sin embargo, sin tener que aclarar que el suyo era un palíndromo, Márquez fue recibido con honores en Los Pinos y felicitado por Enrique Peña Nieto. Sugiriendo que amor con amor, se paga.

   “Usted es la esperanza de los acapulqueños Señor Presidente”. Tal vez no sea un palíndromo perfecto, ni lenguaje servil del alcalde de Acapulco, pero de que dice lo mismo, -si en lugar de haber dicho Señor Presidente, hubiese dicho Peña Nieto-, de ello no existe la menor duda. De atrás para adelante y de adelante para atrás. La lectura es idéntica a la de un palíndromo tan recurrente como el de “Anita lava la tina”.

 

   PD: “Amigo no gima”: Palíndromo.

 

PRPÓSITOS Y DESEOS






PROPÓSITOS Y DESEOS

Luz María Sánchez Rovirosa

“Cuando el que habla es el amor, no se necesitan palabras”

Con un torbellino de acontecimientos termina un año (no exento de violencia) y da inicio uno nuevo. ¿Nuevo en qué? La novedad es el cambio de número tras los 366 (año bisiesto) días recorridos del 2012. Tiempo que tarda la tierra en dar la vuelta al sol (Movimiento de Traslación) ¿Pero el acontecer de nuestras vidas, pone fin a los anteriores sucesos en el paso del último minuto del viejo y el primero del nuevo año?

Festejando, reflexionando y después de hacer (como de costumbre) una serie de propósitos y prodigarnos unos a otros un sinfín de buenos deseos para este recién inaugurado año (que siempre son muy bien recibidos y recíprocos), leí con mucho interés y curiosidad (por supuesto), el mensaje de “año nuevo” al pueblo de México del presidente Enrique Peña Nieto.

Sin ninguna novedad (aparente), entre los muchos buenos “deseos” que “promulgó”, el principal que resalta, es que este año sea de plena salud para “todos” los mexicanos; porque señala “que la salud es la condición fundamental para poder alcanzar cualquier otro propósito”.

Efectivamente la salud es primordial, pero ¿Qué va a hacer el presidente para prodigar a “todos” los mexicanos los servicios de atención médica, para que la gente hasta de los más recónditos lugares del país tenga acceso a ellos? ¿Cómo le va a hacer para que los gobernadores y alcaldes cumplan sus cometidos (en este y otros rubros), no sólo con sus intereses personales y sus partidos, sino con el pueblo de México? ¿Cómo le va a hacer para que los mismos servicios y seguros de salud que tienen los legisladores, permeen (de igual forma) para “todos” sus gobernados?

¿Cómo hará (por ejemplo) para disuadir al gobernador de Guerrero Ángel Aguirre Rivero, para que ya no preste o rente su “flota” de helicópteros como “Taxis VIP” para transportar políticos y hasta jerarcas religiosos, y les dé el uso para lo que fueron adquiridos: para transportar enfermos de las zonas alejadas e indígenas, y la gente ya no se muera abandonada sin atención médica?

Continúa en su mensaje deseando “que en nuestros hogares reine la prosperidad, la felicidad y el entusiasmo que necesitamos para mover a México, y que con un compromiso ferviente, entre todos podamos construir un México mejor”. Añade Peña Nieto; que considera que la llegada del 2013 en el calendario representa una oportunidad de cambio para el país, donde a los mexicanos nos toca ser actores protagonistas.

“Aquí está la verdadera ventana de oportunidad. Hoy nos corresponde a nosotros ser actores protagónicos de la transformación profunda y acelerada que México espera y que México necesita. Sí es posible y nada debe detenernos”. Por supuesto que nada los detendrá a ellos (gobierno), seremos (gobernados) los actores protagonistas de los impuestos, tributos, contribuciones, etc., que será lo que haga prosperar al gobierno, desafortunadamente no al país.

El mensaje señala que el inicio de un nuevo año, es una buena oportunidad para asumir compromisos personales, pero también para tomar conciencia de la influencia que éstos tienen sobre la vida comunitaria; continúa diciendo que “lo que hacemos o dejemos de hacer, tiene un impacto en nuestra Nación, y en esa actitud y disposición, es donde radica lo que realmente podemos hacer para tener un mejor país”.

Aquí aplica otra curiosa pregunta ¿Qué compromisos personales podrán tomar los que menos tienen, los marginados, los invisibles, los que ni siquiera tienen grandes expectativas de sobrevivir como para influir sobre la vida comunitaria de México? ¿Qué actitud de disposición y de entusiasmo podrán tener para apoyar a construir un mejor país, si ni siquiera tienen dinero, educación, salud, ni que comer?

Otro de los deseos del equipo (staff) del presidente Peña Nieto, es que los mexicanos valoren y aprovechen todo su talento (¿?). Talento en México hay; mucha gente que lo tiene lo sabe. Pero ¿cuántos otros lo tienen y ni siquiera saben lo que significa talento? ¿Cuántos mexicanos sobresalen teniendo el beneficio de mostrar al país y al mundo sus talentos, y cuántos millones que teniéndolos se quedan sin oportunidades de hacerlo?

El presidente lanzó sus deseos para “todos” los mexicanos, para que en cada hogar reine la prosperidad; pero ¿cuántas personas existen en México que no tienen hogar, y si lo tienen en cuántos de ellos hay posibilidad de que llegue la prosperidad? Qué pena.

Estos son deseos inalcanzables, lejos, muy lejos de la realidad de nuestro atribulado país. Este texto optimista, simplemente es un mensaje como tantos otros: -llana y pura demagogia-, lleno de prosperidad sí, pero para un gobierno que (para empezar) recibió 11 millones de dólares para su transición. ¡Vale la pena reflexionarlo!

P.D. Bienvenido el 2013. “Y les deseo cosas buenas simples, de esas que tanto hacen falta cuando no se tienen”.

lmsarovi@hotmail.com