miércoles, 3 de abril de 2019

¿EN QUÉ MOMENTO SE SOLTARON LOS DEMONIOS?





¿EN QUÉ MOMENTO SE SOLTARON LOS DEMONIOS?


Luz María Sánchez Rovirosa


“Cuando uno no vive como piensa, acaba pensando como vive”. Gabriel Marcel



Hoy quiero iniciar con una breve reflexión (porque no quiero dejar de mencionar mi angustia ante lo que está sucediendo en México), sobre la posición de los opositores, los antagónicos, adversarios incompatibles etc., que ya en muchas ocasiones (a muchos) nos han quitado el sentido de las palabras, para expresar alguna razón que nos haga entender, que nos haga encontrar alguna respuesta a semejante miseria moral, a semejante perversidad.

Entiendo perfectamente que Andrés Manuel López Obrador, no es una “pera en dulce”, y entiendo también que como ciudadanos podemos y debemos tener diferencias incluyendo las políticas; pero de eso a que por que no sea nuestro presidente favorito, tengamos que meterle el pie ante todas las acciones de gobierno se me hace una acción de podredumbre humana, ante una grave situación que pone en riesgo al país, no nada más a nuestros gustos, caprichos y deseos individuales.

Un porcentaje del pueblo de México (políticos y fieles) tienen sus mentes ocupadas en la idea fija de la partida de quien consideran como un elemento nocivo para el país, más que nada, como única opción de ser la posible solución a sus gustos y preferencias; sin tener en cuenta que los demás de los demás, ya nos dimos cuenta que para y por ello están trabajando, aun cuando otros muchos están durmiendo en sus laureles (como siempre), ausentes de este importante pero demoniaco proceso que salta a la vista.

Pero vamos ya a acercarnos al tema que hoy nos ocupa y entrelazando la historia que se cuenta y la que casi no se cuenta, entre espionaje y guerra, hace ya muchos años nació la empresa Petróleos de México (PEMEX), con un clarísimo decreto que establecía, que la industria petrolera no podía ser adquirida, poseída o explotada por particulares y mucho menos por extranjeros. Y la historia que sí se cuenta dice que el gobierno de Enrique Peña Nieto aprovechando su investidura, modifico el decreto (a modo) y encontró -ipso facto- países compradores con quienes México firmó contratos millonarios. Y entonces nos preguntamos ¿Cuándo se vendió uno de nuestros patrimonios nacionales y nos embargó el patético coraje: desde antes o hasta después?

Hoy tenemos noticias de que nace un sindicato de Pemex llamado “Petromex”, conformado por un grupo de trabajadores, que buscan retirar el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), al diabólico y “ratero” grupo sindical de Carlos Romero Deschamps.

A este nuevo surgimiento el ejército antagónico ya lo nombró como -un nuevo sindicato afín a López Obrador- ¿pero realmente se han puesto a pensar si verdaderamente va a dar la oportunidad de quitarle las desenfrenadas riendas a quien por años y años han reventado al país dejándolo en el estado que está?

Con toda conciencia meditemos sobre nuestro pasado y presente y reflexionemos en lo que se avecina si seguimos así. La tarea de la oposición es cuidar que las políticas públicas sean para bien de México y para el bien común y no buscar alternativas que nos opriman a todos, empeñados en regresar al estancamiento de la barbarie política de triunfalismo fraudulento, demagógico, de promesas incumplidas con el daño colateral de su colapso social ¿En qué momento se soltaron los demonios? ¡Vale la pena reflexionarlo!

1 comentario:

  1. LOS DEMONIOS SIEMPRE HAN ESTADO SUELTOS PERO EL SEXENIO PASADO FUERON LOS PEORES QUE NOS HAN TOCADO Y DESGRACIADAMENTE NO NOS DIMOS CUENTA A TIEMPO
    PARA PONERLES UN ALTO

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