miércoles, 31 de octubre de 2018

ESTIGMA DEL LAGO DE TEXCOCO Y EL NAIM








EL ESTIGMA DEL LAGO DE TEXCOCO Y EL NAIM


Luz María Sánchez Rovirosa


“Cuando vean que para producir no necesitan obtener la aprobación de quienes no producen nada; cuando vean que el dinero fluye a quienes comercian no en bienes sino en favores; cuando vean que los hombres se hacen más ricos a través de la estafa que del trabajo, y sus leyes no los protegen de ellos, pero los protegen a ellos de ustedes; cuando vean que la corrupción es recompensada y la honestidad se convierte en un sacrificio personal; sabrán que su sociedad está condenada” Ayn Rand.



En el actual contexto de un México con una severa crisis política, económica, social y moral, tenemos como primer round de la nueva administración (aún no en funciones) y la Iniciativa Privada (afectada), el tema de la cancelación del NAIM y sus consecuencias, hasta este momento, negativas; hablaremos de lo relevante del Lago Nabor Carrillo, mejor conocido como el Lago de Texcoco, en este espeluznante asunto aéreo.

No me voy a remontar hasta el pasado prehispánico en la grandiosa vida de este inmenso lago que vio nacer la ciudad y la cultura de Tenochtitlan, hermoso cuadro representado en nuestro Escudo Nacional.

La historia de sucesos entre la fundación de la Ciudad Azteca, la conquista, el virreinato, etc., la vamos a omitir, ya que es pródiga en relatos relevantes e interesantes de nuestra historia, y no me alcanzaría ni el tiempo, ni el espacio para describirla.

Así que aterrizaré en el lejano año de 1965, cuando este lago por cantidad de modificaciones, proyectos, asentamientos, mal uso y abuso de la naturaleza, etc., se estaba secando de una manera alarmante, hasta que los ingenieros Nabor Carrillo y Gerardo Cruickshank, después de muchas investigaciones y estudios, instauraron el Plan Texcoco que consistía como eje central, en la rehidratación de las superficies vacías del viejo lago.

De tal suerte que la Ciudad de México se vería libre de inundaciones, tolvaneras, también restauraría el equilibrio ecológico y evitaría la necesidad de acarrear agua para el abastecimiento de partes importantes de la ciudad, de otras cuencas, así como la desviación de los excedentes hídricos hacia el Río Pánuco.

Y como dijo Felipe Calderón Hinojosa “Haiga sido como haiga sido”; los frutos de aquel plan han demostrado ser bastante positivos (cuestiones ambientales), qué entre otras cosas, ha permitido reducir los torbellinos de polvo que llegaban de forma agresiva desde el vaso de Texcoco, y las fuertes inundaciones en unas de las zonas urbanas de lo que otrora fue el Distrito Federal.

Así mismo, con la instalación de las plantas tratadoras de aguas “negras”, el índice de enfermedades endémicas ocasionadas por el consumo de aguas contaminadas también aminoro. Y algunas especies de aves locales y migrantes han vuelto al Valle de México en busca de su hogar definitivo o temporal; después de una larga y cruel ausencia, producto de la desaparición de sus ecosistemas.

El 2 de septiembre de 2014, el todavía presidente Enrique Peña Nieto, anunció que se construiría un nuevo Aeropuerto Internacional, en la zona federal del Lago de Texcoco, hoy (el artificial) Nabor Carrillo.

En aquel entonces, el ex secretario de Medio Ambiente y ex director de Conagua (gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto) José Luis Luegue Tamargo, señaló que el gobierno priísta le ocultó a los mexicanos, que se iba a drenar una laguna junto donde se construiría el NAIM; en ese tenor, sí que se quedaron calladitos y sin que la IP reclamara que el Lago Nabor Carrillo sería chupado en pos del “progreso”; faltándole el respeto a la vida y costumbres de las comunidades indígenas y de todo México.

Y de todos estos intereses amañados y oscuros, es que se ha dado esta revolución en ciernes, que empaña el cambio y el progreso. Este tipo de ejercicios democráticos (consulta ciudadana) son plataformas para permitir al pueblo ser partícipe y formarse una justa opinión, ante un problema que nos compete a todos.

En México no hay prole, no hay muchedumbre; lo que nos pasa es que los gobiernos han convertido al país en un lugar plagado de desigualdades abismales entre los que “tienen y los que son”. En un lugar en la faz de la tierra con problemas sociales, económicos, educativos y culturales muy graves.

Esperando de corazón que pasen rápido los días y que termine el suplicio de esta estigmatización frenética, cargada de odio y violencia; qué en mi opinión muy personal, se me antoja un franco proceso de descomposición humana y terror social, ante lo inentendible de anhelar la corrupción y la impunidad ¡Vale la pena reflexionarlo!

miércoles, 24 de octubre de 2018

EL RESPETO A LA VIDA Y A LA MUERTE










EL RESPETO A LA VIDA Y A LA MUERTE

Luz María Sánchez Rovirosa

“La vida humana tiene valor porque tiene calidad, no, tiene calidad, porque es vida humana”.


Hoy me costó mucho trabajo decidirme sobre el tema a tratar en este artículo, por la preocupación de caer (como lo he visto, leído y escuchado últimamente) en lo repetitivo cuando de política se trata, y que ha producido un cansancio y un quebranto inmerecido en la sociedad de nuestro país.
Rápidamente me voy a referir para entrar en el tema, sobre la violencia ya sin palabras que estamos viviendo en muchos lugares de la geografía mexicana, y que reflejan ya no un pleito o venganza entre bandas del crimen organizado, sino una total y patológica deshumanización en la cual abusan, denigran, y rebajan a las personas hasta los últimos niveles de crueldad, sin importar si estás vivo o muerto.
Tristemente hoy la pregunta es: ¿en qué momento nos perdimos del mundo? Resulta que es difícil comprender por qué a la vida humana se le tiene que agregar el calificativo “digna”, cuando la dignidad es inherente por derecho propio al ser humano. La vida de una persona de principio a fin, por naturaleza debería tener y ser de calidad.
Pero resulta qué en la podredumbre humana, se ha instaurado que ese derecho propio de la vida, se otorga y se niega al antojo de quien sea, de quien se crea superior solo por tener armas como el poder o armas de fuego, que al final ambas son igual de letales.
Aterrizando de lleno al tema, nos detendremos en el aborto, tema polémico que ha recobrado fuerza con la presión de los grupos ¿feministas? que exigen que se acepten las prácticas denigrantes que atentan contra la vida humana (el embrión, el feto), en aras de una supuesta libertad; contando por supuesto con la autorización del estado, es decir, con licencia para matar. Y desafortunadamente este el principio del tenebroso fin, que hoy tenemos enfrente.
El aborto es la interrupción del proceso fisiológico del embarazo, causando la muerte del producto de la concepción (embrión o feto), dentro del claustro materno logrando su expulsión.
¿Cuándo comienza la vida? Una discusión que nos sumerge en un mundo (pudiéramos decir) fantástico, en el que se exponen las más variadas opiniones; por lo tanto, la despenalización del aborto tiene tantos argumentos como los da la imaginación y que poco a poco se vuelven falsos criterios para lanzar iniciativas en el Congreso para que se aprueben; sin tener la certeza científica, religiosa, natural o espiritual; ya que ningún ser humano (investigador o no), ha podido introducirse al vientre en gestación, para saber con plena exactitud cuándo el ser en desarrollo manifiesta sentimientos.
Y para muestra un botón de las principales génesis que se miran desde la óptica del pro-aborto, y es el trillado “para que traer niños al mundo, si van a sufrir las consecuencias de nacer no deseados”, entre una sociedad ya de por sí enferma de problemas sociales, con miseria, desigualdad, la ignorancia, el desempleo, violencia e injusticia; y que en un patético grito de dolor, algunas mujeres claman una legislación en pro del aborto, que supuestamente les permita mejor “calidad de vida”, y la seguridad que no morirán a consecuencia de las condiciones clandestinas en que se les practican los abortos. Lamentable.
¿Entonces el no traer niños no deseados a este valle de lágrimas, en el cuál si nacen, se volverá delincuentes drogadictos, violadores, hace tan necesario (según postura) legalizar el aborto como un derecho fundamental que toda mujer debe tener, pues es una decisión íntima que hacen sobre su cuerpo?
Gravísimo error, a diferencia de la muerte asistida (ahí sí decisión personal, sobre su propio cuerpo), en el aborto a quien asesinan es al bebé, porque la madre y su cuerpo, siguen viviendo muy felices. Hasta el siguiente crimen.
Y es exactamente donde este serio problema, adquiere su máxima dimensión: cuando el aborto es utilizado como recurso anticonceptivo, es decir, sin ninguna justificación de ninguna clase, sino simplemente, como un medio de evitar una obligación, consecuencia de haber actuado con irresponsabilidad previa, cuando existen múltiples y eficaces medios anticonceptivos para evitarlo.
La ley, la religión, la ONU (y demás organizaciones) y la sociedad, deben tomar en cuenta en sus posturas y proyectos antes que otra cosa, las consecuencias de esta falta de moral social de los individuos, al abrirles las puertas al desenfreno y con ello la posibilidad de actuar con tanta irresponsabilidad. A los ¿legisladores, juristas, expertos y demás? no les vaya a salir el tiro por la culata, siempre es mejor la prevención, que solucionar problemas que tantas veces, se les salen de las manos. ¡Vale la pena reflexionarlo! 




jueves, 11 de octubre de 2018

FANTASMAGÓRICOS ÚLTIMOS DÍAS







FANTASMAGÓRICOS ÚLTIMOS DÍAS


Luz María Sánchez Rovirosa


“Lo que las leyes no prohíben, puede prohibirlo la honestidad”. Séneca.


Hoy tocaré un tema no difícil, pero que resulta polémico por la gran variedad de pensamientos (que no criterios o convicciones) que giran alrededor del Alfa y el Omega del gobierno en México.

Para hablar de las “distinciones” a las que se ha hecho acreedor el todavía presidente de la República Mexicana, Enrique Peña Nieto durante su embarrado gobierno, haremos una (aun cuando será breve) intensa reflexión con espejismo, con el gobierno que próximamente presidirá Andrés Manuel López Obrador.

Peña Nieto llega a sus últimos días de presidente con sendos escándalos de tremenda corrupción, las mentiras que nos revolotean por todo el territorio geográfico; con la violencia exacerbada, el crimen organizado enraizado por todos los rincones del país haciéndose notar cada día más como los dueños de México; y con una impunidad fuera de toda realidad.

Los escándalos de corrupción, abuso de poder, conductas delictivas e ilegales y faltas administrativas de sus altos funcionarios a lo largo de su gestión, infortunadamente y hasta este momento siguen impunes.

Los mexicanos que sentimos y resentimos los abusos de este gobierno, estamos contrariados y asombrados, ya que tan cerca del contracturado fin de sexenio, nos hemos percatado que a los miles de “chayoteros”, “bots”, “chairos” y demás yerbas, como se les suelen llamar en las redes a las personas que golpean, dan información falsa, desvirtúan videos y hacen una serie de canalladas con tal de cumplir con el que todavía les paga, para desviar la atención de la sociedad, de la manera como se va y como deja el país Enrique Peña Nieto, ganando la atención de los pobres de convicciones y de criterio, logrando así su cometido de espejear las malas acciones del actual presidente, con el presidente electo, pero que todavía no entra en funciones.

Desde hace algunos meses la verborrea del actual presidente, ha enfocado sus mensajes en tono de despedida, incluso mencionando que “muy pronto” iniciaría con la entrega de las obras que tenía pendientes. Sin embargo y si no me equivoco todavía faltan por concretar más de 30 obras públicas de sus 266 compromisos de campaña: hospitales, vialidades y obras de gran impacto como el tren México-Toluca y el tren eléctrico urbano de Guadalajara, Jalisco; por mencionar solo algunas de las muchas que así se quedarán.

Además de las muchas obras que “por diversos motivos”, fueron canceladas como son: La Presa El Salto en Amecameca, estado de México, El Centro Logístico Industrial Puerto Interior, Tlaxcala; “La Refinería de Hidalgo”; El tren Transpeninsular Mérida-Quintana Roo, entre otras.

Sin embargo, que fácil es tirar la pelotita al otro, al que todavía no tiene la prerrogativa de tomar decisiones; al presidente electo, quien no es una autoridad reconocida ni por nuestra Constitución ni por nuestras leyes secundarias, por lo que sus actos no pueden surtir efecto legal alguno.

Así que por favor ya no revienten al país, quienes tachan todo lo que AMLO hace y dice o le pegan como rémoras sendas responsabilidades y culpabilidad de cuestiones que aún no pueden estar en sus manos.

Todo acto de autoridad que beneficie o dañe a la sociedad mexicana, debe estar indudablemente soportado por la Ley, situación que hasta el próximo 1 de diciembre cobijará a AMLO.

Qué triste es la apatía y el conformismo que nos agobia, por la manipulación de ignorar lo que somos y aceptar lo que nos dicen los demás que somos, por cobardía, por conveniencia, por comodidad o por ambiciosos.

Entonces lo que hemos logrado con esta estúpida reyerta anti-AMLO, es perder nuestra capacidad de reflexionar para aceptar lo discordante, lo que nos lleva a jactarnos en lo personal, en lo individual y no en el Bien Común, terminando parados ante la deshumanización, es decir, en un supuesto “desarrollo humano”, que ha servido para borrar lo humano. ¡Vale la pena reflexionarlo!

miércoles, 3 de octubre de 2018

LOS ATRIBUTOS EN EL INFIERNO









LOS ATRIBUTOS EN EL INFIERNO



Luz María Sánchez Rovirosa


“Ignorar las consecuencias de los propios actos, eso es el infierno”. "Bar del Infierno" (2005), Alejandro Dolina.

“Que el cielo exista, aunque nuestro lugar sea el infierno”. "El Aleph" (1949), Jorge Luis Borges.



De todos los acapulqueños es sabido, que el domingo pasado tomó protesta como Presidenta Municipal de Acapulco Adela Román Ocampo de la coalición “Juntos haremos Historia”; aceptando un reto de gobierno muy complicado.

La situación que se vive en el puerto es terrible, inmersos en una ingobernabilidad donde la violencia dispone el “orden del día” y donde la seguridad está en manos de un grupo de policías que abusa e incluso se atreve a amedrentar a la sociedad, gozando de una total impunidad por las autoridades en turno.

Aún no podemos externar una opinión sobre Adela como alcaldesa, ya que solo son un par de días que juró su compromiso con el municipio y su gente; y no me gustaría caer en criterios equivocados. Pero lo que sí puedo asegurar sin temor a equivocarme, es que Román Ocampo descendió al mismísimo infierno.

De frente y ya sin las cortinas de humo que trataron de disimular el caos de Acapulco, Adela se enfrenta desde este momento a todo tipo de aberraciones, desafortunadamente ignorando si ya tiene un análisis experto y/o un plan estrategia para dar inicio al recuento de los daños.

Evodio voló, voló y voló dejando detrás un desbarajuste en lo económico, en lo administrativo y en los servicios públicos. Dejó un puerto sepultado en la sangre derramada por la violencia (que no le importó) y la inseguridad; pero también ahogado por toneladas de basura que cerraron un cerco pestilente y nauseabundo por toda la ciudad.

Hoy como tantas otras veces, estamos esperando que suceda el milagro de la transformación, la cuarta, la quinta, la décima, pero lo importante es que suceda. Y se me ocurre que muchas veces la situación se repite, porque las personas no hacen uso correcto de su memoria.

La memoria humana es la función cerebral como resultado de las conexiones sinápticas entre las neuronas, mediante la cual, el ser humano puede retener experiencias pasadas.

Probablemente de lo más importante para cualquier ser humano, es su capacidad para almacenar conocimientos y vivencias de las cuales pueda beneficiarse en su vida y actuaciones futuras.

Po eso cuando estamos pendientes de un nuevo gobierno (entre otras muchas cosas de la vida) que nos trae “nuevas” expectativas, debemos de trabajar mucho con nuestra memoria, para que esta nos saque de dudas y podamos distinguir los atributos que deben tener las personas que se nos acercan y nos hablan bonito al oído, engañando a nuestros demás sentidos.

En el caso que nos agobia hoy a los acapulqueños, la memoria nos obliga a identificar en Adela Ocampo Román los siguientes atributos.

La visión que tenemos de una administración fallida y tenebrosa como la que dejó Evodio y Cía., tiene que exigir a Román Ocampo a tener conocimiento de los mecanismos legales y reglamentarios que tendrán que ver mucho con la solución a los problemas. Ella es Licenciada y Magistrada (con permiso); así que seguro es, qué en este sentido, vamos bien.

Debe demostrar carisma y sensibilidad relevante para acercarse a la gente y comunicarse con ellos de manera afectiva. Tiene que ser demostrable su limpia trayectoria de “servicio público”, y allegarse de un equipo de trabajo leal y trabajador.

Creatividad y capacidad para obtener y administrar los recursos públicos (erario) de manera eficiente y honesta para el bien común en todos los sentidos, con el respaldo desinteresado de sus colaboradores.

La conclusión es que cada día el problema de la extrema desigualdad (financiera, social y de atención) más el abuso son más dolorosos, porque la corrupción y la impunidad, han estado en el ADN político de los horribles hombres del pasado, que han marcado un esquema del autoritarismo y soberbia de la oligarquía dominante, junto con pegado de la idiosincrasia servil, roedora, “lingüística” y acomodaticia de muchos, quizá demasiados.

Sabemos que Adela Román Ocampo, tiene muchos de los atributos que obliga la emergencia acapulqueña. Qué oportunidad tan grande tiene hoy, para demostrar que amén de todos los requisitos solicitados para emprender la lucha contra la corrupción, cuenta también con el más básico de los atributos, pero a la vez el más importante: “La Calidad Moral” ¡Vale la pena reflexionarlo!