CULPABLE ¿SOY YO?

CULPABLE, ¿SOY YO?

Luz María Sánchez Rovirosa

“No solamente es ciega la fortuna, sino que de ordinario vuelve también ciegos a aquellos a quienes acaricia” Marco Tulio Cicerón.

El Ayuntamiento de Acapulco vive un desastre financiero dice el alcalde Luis Walton, y corrobora que ya le entregaron la información sobre el endeudamiento, y que la verdad las cifras están muy mal. “Vivimos una situación grave en el municipio.

Sobre la recaudación (tributos), Walton explicó que se recogen aproximadamente 800 mil pesos diariamente, pero dijo que esta es una suma que no puede solucionar la magnitud de los problemas; por lo tanto, hizo un llamado a los contribuyentes a pagar puntualmente sus impuestos.

Al mismo tiempo insistió que se tienen que cancelar las nuevas bases y liquidar personal, porque no se puede seguir con una carga financiera tan fuerte, porque “al rato no va a alcanzar ni para pagar a los de base, ni hacer absolutamente nada” (sic). Y dijo que para los finiquitos tiene que buscar de donde se obtendrá el dinero. ¡Cuidado! Luis Walton, después vienen los juicios que cuestan mucho más.

Cuando Walton estaba en campaña, ya sabía perfectamente bien la magnitud de los problemas financieros de Acapulco, como lo sabíamos todos (y aunque no conocíamos las cifras, la imaginamos); así que hoy aunque tengamos mucha curiosidad por saber la cantidad de dinero que rodó a la bolsa de Añorve y compañía, mucho más queremos saber que tenía (y tiene, además de quejarse) en la cabeza Luis Walton para resolver los problemas, amén de las primeras acciones con que las que va a “atornillar al pueblo”, como son las de liquidar a los trabajadores de base y no de base.

Y digo con certeza “le va a atornillar al pueblo”, porque hasta ahorita no hemos escuchado nada más que liquidará a empleados (aunque no sabe de dónde sacará el dinero) conforme a la ley. Entonces ¿Qué alternativa podría dar el municipio a estas personas cuando se queden desempleadas y se vea vulnerada todavía más la seguridad del puerto por obvias razones?

A Luis Walton, el deseo de ser alcalde no le permitió ver bien más allá de su ambición satisfecha, y es una pena que le haya llegado el puesto en estas condiciones; porque estoy segura que si él hubiera sido el alcalde y no Añorve, hoy Acapulco se encontraría en otras condiciones, aunque también nos hubiera abandonado para cumplir su deseo de ser gobernador. Pero desafortunadamente el hubiera no existe, aunque tantas veces quisiéramos que sí.

Y bueno, uno de los miles de problemas que nos aquejan es la basura. El alcalde Luis Walton dijo que en una semana más, va a estar resuelto el problema de los deshechos al cien por ciento, pues le apuesta a que ya llegaron los nuevos camiones recolectores y en unos días más llegarán 50 de 100 contenedores que adquirió el gobierno municipal por más de un millón de pesos (¿?).

Por su parte Andrés Lara García Director de Saneamiento Básico, dijo que esta área del Ayuntamiento está pasada de nómina, y por lo tanto más del 50 por ciento del presupuesto se va en salarios (más aviadores y lo acumulado), y consternado señaló que la dependencia está destrozada.

Y bueno como es natural cuando las cosas no son del todo claras, ya se empieza a especular sobre el beneficiario o los beneficiarios de la renta de los camiones de volteo que están recogiendo la basura, y de los camiones nuevecitos que ya están en funciones, más los que están por llegar, propiedad de unas empresa llamadas Liberaso y PASA, así como los contenedores.

Lara García dijo que el manejo de los recursos y quien determina quién (es) entran en las adquisiciones es el Alcalde Luis Walton. Pero nosotros no podemos dejar de lado a Carlos Álvarez, quien sabe hacer las cosas “muy bien” o “muy mal”, hasta que las auditorías le encuentran los agujeros negros que dejó pasar como secretario de SEFINA, o en su calidad de Diputado Presidente de la Comisión de Cuenta Pública del Estado, como (uno de tantos) el desvío del dinero que Zeferino “tomó”, para hacer un helipuerto en Casa Guerrero. Si así empezamos, empezamos muy mal.

Jorge Issac Pérez Salas, regidor del PAN, pidió al director de Saneamiento Básico, la información sobre la partida de donde se tomó el dinero para estas adquisiciones (camiones y contenedores). Y Wulfrano Salgado Romero, regidor del PRD, señaló que para la contratación de las nuevas empresa recolectoras de basura, tienen que revisar bien los contratos, para que no vuelva a pasar lo mismo que con Servitran (S.A.), que de manera arbitraria rompió el compromiso. Por obvias razones, no la obtuvieron.

Sin ser hostigosa (solo precavida después de tantos golpes bajos al puerto y su gente), me alegra saber que el problema de la basura se va a resolver, sólo que sí nos gustaría que haya transparencia, para que el pueblo empiece a recobrar la confianza en las autoridades en turno.

Otro grave problema que también fue herencia del “mal”, son las luminarias. Otro contrato que se debe revisar minuciosamente, es el de la empresa “Óptima”, que supuestamente es la encargada del cambio de las luminarias de las calles del puerto. Dicha empresa se dedica (o dedicaba), a quitar las lámparas (que aún servían) y ponía supuestamente las nuevas que no servían, o estaban a punto de no servir. De esta manera Acapulco prácticamente está en penumbras. Ojalá se le finquen las responsabilidades correspondientes a la empresa y “se haga la luz” de nuevo en el puerto, por el bienestar y seguridad de los acapulqueños.

Pero ¿Quién es el culpable de todo este desperfecto en Acapulco? Su servidora no, porque denuncia (aunque me critiquen). Se le preguntó al gobernador Ángel Aguirre la posibilidad de impulsar acciones (incluso legales y penales) al ex alcalde Manuel Añorve Baños, por el “presunto” desfalco al municipio de Acapulco y respondió que la Contraloría General del Estado, ya realiza una serie de investigaciones y evaluaciones sobre la situación financiera que dejaron las anteriores administraciones. Pero atajó, que va a usar el mismo criterio para auditar el gobierno municipal, como lo hizo con la administración estatal de Zeferino Torreblanca Galindo, de la que todavía estamos esperando, no sólo informes, sino acciones penales en contra de los responsables, porque todos los involucrados llámense Zeferinos, Bajos, Álvarez, De la Vega, Manuel, Julieta, etc. andan sueltos, incluso (algunos de ambas administraciones) están premiados con puestos de relevancia. ¡Qué Dios los perdone! ¡Vale la pena reflexionarlo!