OPORTUNIDAD DE RENACER

"OPORTUNIDAD DE RENACER”

Luz María Sánchez Rovirosa

"Cuantos hombres se precipitan hacia la luz, no para ver mejor sino para brillar." Nietzsche.

Quiero iniciar el día de hoy, con una sincera felicitación a la Familia del Sol de Acapulco, por el 34 aniversario de labor periodística. Dios los bendiga para seguir cumpliendo muchos más, en este quehacer de la información oportuna y veraz.

Se supone, que la democracia actual se caracteriza por ser un régimen que hace posible manifestar el pluralismo social. La administración que recién comenzó, encabezada por Luis Walton Aburto, tiene que reforzar todas sus esquinas, con estratégicos mecanismos de protección, para la renovación de Acapulco frente a las arbitrariedades y abusos que cometió el gobierno de Manuel Añorve Baños, una persona llena de resentimientos políticos y hambriento de poder, que dejó un puerto maltrecho y desquebrajado; y quien pasó por alto la democracia.

Hoy el ex alcalde de Acapulco, además de ser premiado como diputado plurinominal en San Lazaro, tendrá un “plus” extra, y será el secretario de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación; comisión que se encarga de revisar los informes que elabora la ASF (Auditoría Superior de la Federación), sobre los recursos federales que ejercen dependencias, estado y municipios.

Así que podremos imaginarnos que sucederá con la “abultada” deuda y desvíos (campaña para gobernador y anexas), del dinero (ajeno) que tan mal manejó, cuando administró las arcas del Ayuntamiento que él presidía, si él mismo será juez y parte. ¡Pobre Acapulco!

De esta manera Luis Walton tendrá mucho quehacer en el puerto, porque hablar sobre el inicio de una administración, es hablar de llevar a cabo las propuestas viables, esas estrategias que los gobernantes exponen para el convencimiento de los ciudadanos y para ese bien común que seguimos “queriendo y seguimos anhelando”. Sin ellas, o sin ser las adecuadas, toda la esencia de un buen gobierno se pierde, como se pierde también el poder que emana de un puesto público de esta naturaleza, que está obligado a prodigar y defender los intereses de todos, con las “innovaciones” que propusieron en campaña.

Por eso debemos preguntarnos ¿Será Luis Walton un buen presidente? ¿Será un buen presidente que no perderá de vista los mecanismos legales y reglamentarios que prioritariamente tiene que respetar y hacer respetar, por los cuales hará justicia para obtener la solución de los problemas? ¿Será Luis Walton un buen presidente, que tenga la creatividad para aprovechar las oportunidades de desarrollo para la entidad que se le presenten? Por lo que estamos viviendo en estos 20 días, está por verse; aunque como salidos de la nada, ya hay camiones “nuevecitos” recogiendo la basura (que bueno, que alegría), sin que hayan finiquitado a Servitrán(S.A.) ¿Serán de los mismos?

Cambiando de tema y recordando que mañana viernes 19 se conmemora en todo el mundo “El Día del Cáncer de Mama”, uno se pregunta ¿Qué pasa por la mente de una mujer en el momento en que le dicen que tiene cáncer de mama?

Cuando uno escucha por primera vez la palabra cáncer asociada a un diagnóstico propio y de pronto te enteras que lo tienes, suena como a sentencia de muerte, y de verdad sientes que ves la muerte. Escuchar esa voz es horrible, es como si el mundo se derrumbara frente a ti en un instante, y de repente comienzas a girar en una espiral de dolor y uno se pregunta ¿Pero yo qué hice? No es posible que esto me suceda a mí ¿Por qué? Si todavía tengo ganas de vivir, si todavía necesito vivir.

De esta manera hace 8 años, en ocho días mi vida cambió. Simplemente estaba aterrada, sin fe ni esperanza, sintiendo que tenía a un enemigo dentro de mí que podía llegar a causarme la muerte, y sin embargo ¿Con qué armas enfrentaría la terrible batalla, si no sabía nada de él?

Esta terrible experiencia marcó mi vida en un antes y un después, fue la que me llevó a tener un curso acelerado de extra madurez, la que me obligó a generar todo un replanteamiento de lo que yo hacía, de cómo era mi vida, de cómo me estaba proyectando, y de lo que quería hacer conmigo misma, con mi familia, con mi entorno y con mi futuro. Así que parada en esa línea, miré dos opciones: vivir por lo que decían las estadísticas o vivir por las ganas de vivir.

Y aquí estoy, muchos años después de iniciar un largo recorrido por un camino de búsqueda, porque antes de este diagnóstico sentía que tenía el mundo en mis manos, y ahora sí que sé que nunca será así, porque aprendí que cada vez que ese mundo cambia, la experiencia, la madurez y el crecimiento de tu vida, cambian también.

Entendí que aún tenía mucho por aprender de mí, de todas las personas que estaban a mi alrededor, de mi familia, de mis amigos, y por supuesto de mi vida espiritual; y también comprendí, cómo Dios me estaba dando la oportunidad de mirarme en un espejo, para identificar que la esencia, ese ser maravilloso que hay dentro de cada persona, es la fe en Él (como cada quien lo vea y lo sienta), esa fe que nos permite superar todo lo que nos proponemos; y así me di cuenta también, porque Dios es infinitamente bueno, que las únicas barreras que limitan nuestro propio crecimiento, son las que nos ponemos nosotros mismos.

Y así me ensoñé en lo importante de poder disfrutar con mi familia, con mis amigos más momentos de felicidad, para afianzar sus cariños, pero sobre todo, incorporé mi vida en la paz espiritual en la verdad, en donde existe coherencia y congruencia en nuestros actos, acordes a nuestros principios morales y la fe católica que practicamos mi familia y yo. Pero ante todo, esta gran lección, me enseñó a perdonar y a no tener resentimientos.

Sí Señor, “Gracias a la vida que me ha dado tanto”, pero sobre todo, “Gracias Dios mío” que me has dado tanto para aprender y para crecer, para encontrar en tu amor, lo que nos hace grandes, para que los problemas se vuelvan pequeños.

Hoy como cada año desde entonces, hago público este breve testimonio, platicándoles mis vivencias del alma, porque estoy convencida de que uno de los propósitos de mi vida es poder servir a los demás, es poder seguir sirviendo a los demás, compartiendo mis humildes conocimientos y mi experiencia.

Mañana 19 de octubre día internacional de la lucha contra el Cáncer de Mama. Hay que “ayudar a ayudar”. Pintemos nuestras vidas de rosa, autoexplórate. La prevención es un gran paso, y el cáncer detectado a tiempo no es una sentencia de muerte, sino una oportunidad de renacer. ¡Vale la pena reflexionarlo!

P.D. Para cualquier comentario sobre esta publicación, con mucho gusto estoy a sus órdenes en el siguiente correo: lmsarovi@hotmail.com