"FUTURO 21"

“FUTURO 21”

Luz María Sánchez Rovirosa

"La ciencia que sirve para hacernos orgullosos y que degenera en pedantería no vale más que para deshonrarnos." San Francisco de Sales.

“Futuro 21 es una iniciativa política de liberales y socialdemócratas que busca ser un factor de unidad opositora y un contrapeso al gobierno de Andrés Manuel López Obrador”.

Conformado por un puñado de políticos resentidos, sobras de los partidos chamuscados a quienes por supuesto México no les importa; hoy nos aseguran que con este revoltijo (apestoso) apuestan a construir algo nuevo y superior; porque queremos dicen: “ser un factor de unidad opositora” (¿?).

Si todos los mexicanos deseamos un país mejor, un país de oportunidades, de reformas positivas de justicia, seguro y protegido, surge una pregunta a esta “iniciativa” ¿Por qué en lugar de ser una agrupación opositora de Andrés Manuel López Obrador, no se conforman como un grupo de lucha en favor de México?

Existe una dolorosa perturbación que se distingue hoy en la “clase política”, porque podemos estar seguros que el intento de muchos de violentar la política de López Obrador y especialmente este batidillo de “fauna nociva” (Futuro 21), está marcado sin duda alguna por la esquizofrenia política, de ambición y poder.

No es posible, no es permisible, ya bajo este marco conceptual, cómo la sociedad civil, es decir, los gobernados, somos testigos de la violencia directa e indirecta de la que estamos siendo objeto, es decir, como la usan, como manipulan (con los que se dejan), para tapar sus disgustos personales o conflictos de grupos, que este gobierno “diferente” les provocó, acostumbrados a vivir de otra muy distinta manera.

Pero desafortunadamente, todo ese producto de la manipulación y desinformación o tendenciosa información “ideológica”, tiene un carácter significativamente más negativo cada día para la vida de los mexicanos; siendo testigos diariamente como se destrozan reputaciones, mientras tratan de derrumbar un gobierno que nos les conviene a sus intereses.

Sí es verdad y lo reconozco porque no soy ni fanática, ni desmemoriada, amén que no me gusta el “chayote”; que la manera de gobernar de López Obrador (4ª Transformación) es intrínseca y difícil, que ha tenido marcados errores (pero también grandes aciertos) y que los primeros meses no han sido la panacea que muchos esperaban. Pero uno se pregunta ¿Por qué en tiempos pasados, con problemas financieros, políticos y sociales muy graves, los mexicanos permitimos que las cosas tomaran su cauce dándoles tiempo para dar un giro al timón?

No me voy a detener en mencionarlos, porque los mexicanos los conocemos bien, a pesar de que hoy continuamente se argumenta que no hay que ver al pasado ¿Y cómo no vamos a ver el pasado, si es justo una no lejana retrospectiva fuera de control la que nos trajo hasta aquí, hoy y de la forma en que estamos?

Vienen todavía tiempos difíciles, que Andrés Manuel López Obrador tendrá que resolver con mucha madurez y cuidado, porque México (aun cuando no lo quieran aceptar) con los gobiernos del PAN y del Nuevo PRI, perdió toda la esencia de un gobierno que emana de un puesto público de esta naturaleza (excepto Fox), al haber robado las elecciones, es decir la decisión del pueblo.

Si quieren entender la gravedad de la situación que atravesamos; solo hay que imaginar el “Futuro 21” que nos espera, con esta nueva “alianza” que está recogiendo el sargazo para seguir contaminando. Cierto así lo hizo Morena (antes que me lo señalen); pero este partido contendió de manera honesta y ganó para gobernar México en tres ocasiones. Y esta pócima delirante, lo único que desea es envenenar al país. ¡Vale la pena reflexionarlo!